lunes, 2 de agosto de 2010

Noches blancas

Ahí está el trabajador nocturno, viendo pasar el tiempo en la nada. El frío del invierno recorre su piel, filtrándose por los poros y provocando los escalofríos más largos que podría tener un ser humano. Ve pasar la noche y la vida. Duerme durante el día para rendir al ciento por ciento durante su jornada laboral. De él puede depender el destino de las personas que lo necesiten en cualquier horario de la madrugada. Si no llegara a estar despabilado, podría fallar su propósito.
La soledad y el silencio son sus únicos compañeros. La soledad que está, a su lado, marcándole que todo depende de lo que él decida. No hay nadie a quien consultar, ni nadie a quien delegar algún trabajo. No hay nadie, ni nada. El silencio de la noche, de una ciudad cansada del trajín diario, que reposa, que descansa para comenzar otro día, lo envuelve y lo protege.
El sonido del reloj, cada segundo que va avanzando en la noche, la radio que pasa las mismas canciones melancólicas, para aquellos enamorados en vela y el viento que, de vez en cuando, mueve la copa de algún árbol, son los acompañantes de la velada.
No se porque será, pero la noche está hecha para pensar. Aquí uno piensa y vive, imagina un mundo distinto, cree en el poder del cambio e idea estrategias y planes para modificar la realidad. Luego el sueño dispersa a todos los pensamientos. Abre su boca y expulsa al sueño por ella en forma de bostezo, lo sujeta con su mano y lo arroja fuera de su cuerpo, como quien se quita algo que le molestase.
Luego vuelve a su casa y se acuesta a dormir. Ve a sus hijos sólo unos momentos. Cuando llegan de la escuela, los mira, le besa la frente a cada uno y comienza a prepararse para marcharse nuevamente entendiendo que la felicidad y la tranquilidad de su familia esta en su trabajo y su esfuerzo.
Antü
Pequeño homenaje a un amigo, y a todo el que se sienta identificado, para que vea que siempre existe el reconocimiento en los que te quieren, solo que los grandes actos suelen ser imperceptibles, pero perdurables en el tiempo y en la memoria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario